El complemento flexible y eficiente para impulsar el transporte público en zonas de menor densidad y horarios valle.
El transporte bajo demanda mediante minibuses y microbuses compartidos ofrece un sinfín de posibilidades para mejorar la movilidad en las ciudades, aportando eficiencia, flexibilidad y adaptabilidad frente a situaciones de demanda dispersa, débil o fuertemente variable.
Entre sus aplicaciones más interesantes se encuentra el transporte al trabajo, la optimización del transporte público en zonas residenciales suburbanas y urbanizaciones, servicios nocturnos, servicios de transporte turístico, servicios especiales adaptados...
Un modelo híbrido entre alquiler de vehículos y transporte compartido, los programas de vanpooling han tenido un gran éxito en países como Estados Unidos, donde en algunas áreas metropolitanas representa hasta el 15% de los desplazamientos al trabajo.
La nueva generación de programas de vanpooling añade al concepto original herramientas digitales de gestión avanzada, que permiten una mayor flexibilidad y fiabilidad, haciendo estos programas aún más atractivos para los "commuters".
Integrar el taxi en el sistema de transporte público ofrece importantes ventajas que muchas ciudades ya están aprovechando.
Especialmente en escenarios de muy baja demanda, como zonas dispersas y alejadas del municipio, el taxi compartido ofrece una alternativa económica y sin costes fijos, de gran utilidad para extender la red de transporte público aumentando su cobertura.
En MÓBILIT tenemos experiencia en estudiar este tipo de integraciones y en diseñar el entorno operativo para que puedan llevarse a cabo con éxito.
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